El trabajo voluntario y las alianzas fueron los factores claves de la primera versión del concurso de canto lírico, organizado por el Capítulo Chileno del National Museum of Women in the Arts y la Universidad Mayor.
Una noche mágica. Eso fue lo que vivieron los más de 200 invitados que asistieron a la final del concurso “Mujeres en la Música”, realizada el martes 30 de septiembre en la Sala Claudio Arrau del Teatro Municipal de Santiago.
Las seis sopranos y mezzosopranos finalistas se presentaron ante un público ansioso por conocer a la nueva estrella del canto clásico en Chile. Entre los asistentes se encontraban invitados especiales, socios, miembros del Consejo Asesor y del Directorio del Capítulo Chileno del NMWA, y algunas de las más altas autoridades del sector cultural, encabezadas por la Ministra de Cultura, Claudia Barattini, la Alcaldesa y Presidenta de la Corporación Cultural de Santiago, Carolina Tohá, y el rector de la Universidad Mayor, Rubén Covarrubias.
Luego de la premiación, los invitados pudieron participar en un glamoroso cóctel realizado en el Club de Oficiales de la FACH, que se encuentra en el Palacio Subercaseaux, Monumento Nacional ubicado justo frente al Teatro Municipal de Santiago. La recepción, que puso la guinda de la torta a una mágica noche, fue auspiciada por Credit Suisse, y contó con la generosa colaboración de la Fuerza Aérea de Chile, la Productora Stgo. Cult y la viña Kingston Family Vineyards.
Alianzas y voluntariado
El éxito de esta iniciativa, que espera volver a realizarse entre 2016 y 2017, estuvo marcado por la colaboración de instituciones y personas que trabajaron decididamente por la promoción de los nuevos talentos femeninos de la música lírica nacional.
El objetivo del concurso es dar visibilidad a las mujeres en el canto lírico, pues “la discriminación no sólo se encuentra en la política o en el mundo del trabajo, también en el arte, la literatura, y el diseño”, aseguró Drina Rendic, Presidenta del Directorio del Capítulo Chileno del NMWA, quien concibió la idea y convocó a las instituciones y voluntarios a participar.
El primero socio que se sumó a esta idea en calidad de co-organizador, fue la Universidad Mayor, institución clave en el desarrollo del concurso. A nivel institucional, el concurso contó con otros de tres socios destacados: Credit Suisse, Fundación Hildegard Behrens y Fundación Mustakis. Otras organizaciones colaboradoras fueron C-imagen, Gabriela Mistral Foundation, Teatro CA660, Teatro del Lago, Teatro Municipal de Santiago. Los media partners fueron CNN Chile, Diario La Tercera, Revistas Copesa y Radio Paula.
Para llevar cabo esta iniciativa, se conformó un comité organizador, integrado por representantes de las instituciones que lideraron el proyecto. Por parte del Capítulo Chileno del NMWA participaron Carmen Gloria Larenas, Drina Rendic y la Consultora C-imagen. La coordinación estuvo a cargo de Teruca Martínez. Por parte de la Universidad Mayor, los integrantes del comité fueron Carlos Sánchez, responsable del tema técnico, Nurys Olivares, coordinadora de las concursantes y miembros del jurado, Miguel Cid, Carola Espinoza y René Lara, quien tuvo la responsabilidad de coordinar la participación de la Universidad en el concurso.
Un selecto grupo de especialistas fue el encargado de elegir a las ganadoras. El jurado estuvo integrado por Carmen Luisa Letelier, Premio Nacional de Artes y docente de la Universidad de Chile; Patricia Cifuentes, intérprete nacional de canto lírico y docente de la Universidad de Chile; Mariana Ossandón, intérprete nacional en canto y docente del programa de Canto de la Escuela de las Artes Casa Richter-Teatro del Lago; Andrés Rodríguez, Director General del Teatro Municipal de Santiago; Carlos Sánchez, Director de la Carrera de Pedagogía en Artes Musicales de la Universidad Mayor; Violaine Soublette, intérprete nacional en canto, docente y directora de la Carrera de Interpretación Superior en Canto de la Universidad Alberto Hurtado; y Lorena Vergara, clarinetista, profesora universitaria y directora de orquesta.